domingo, 19 de mayo de 2013

Abrazos. (Un agradecimiento a los que os acordais de mi)

"Dedicado a los que callamos nuestra voz para después darlo todo con una mirada."

El otro día mientras estaba en clase se me ocurrió la frase que acabais de leer. Puede que os parezca una bagatela. El caso es que pensaba mientras mi alumnado hacía un examen... "Cuántos de nosotros y de nosotras callamos nuestra voz para después decir tánto con una mirada..."

En ese momento crucé mi mirada con una persona y no pude evitar sonreir para mis adentros. Para después seguir meditando de forma peripatética.

Al cabo de unos días llegué al absoluto convencimiento de que lo que necesita el mundo es algo más que amor. Estamos todos tan convencidos de nuestras mojigaterías que apenas nos miramos, o por decirlo desde otra perspectiva, apenas nos paramos a mirarnos los unos a los otros.

Hace unos días en mi casa se instaló un virus que nos pasó factura a todos. Una gastroenteritis fulminante que duraba dos días. Tan solo dos días, ni uno más. Pero os puedo asegurar que eran dos días de no ver la luz del sol. Uno por uno fuimos cayendo. Eso me hizo pensar en lo débiles que podemos llegar a ser. En lo expuestos que podemos llegar a estar. En ese momento estábamos unidos, todos unidos contra la enfermedad que nos estaba castigando como una plaga bíblica.

Pero una vez volvamos a la rutina, que todo lo marchita, o no, es muy posible que nos miremos, pero no desde la ternura, no desde la vulnerabilidad. Porque en esos momentos, cuando te sientes dependiente y vulnerable, en esos momentos es cuando más te alegras de ver que puedes confiar en el resto del mundo.

Sé que en el instituto más de uno y de una pensabais en mi, pero no me llamabais porque no teneis mi teléfono, ya que sois alumnado, o no me pusisteis un mail porque soy "el profe" y cuesta hacerlo. Pero como ya sabeis me conformo con que os hayais acordado de mi. Y esa certeza sí que la tengo. Para vosotros y vosotras mi agradecimiento. Y para los que sí teneis el teléfono, solo colegas que no alumnos por supuesto, gracias por llamarme. Reconfortais como poco y en la mayoría de los casos me haceis feliz.

La canción es Year of the Rat y la canta Badly Drawn Boy. Todo un descubrimiento, lo reconozco.

¿Es para ti un descubrimiento esta entrada? Si es así, cuéntame por qué...


domingo, 5 de mayo de 2013

La Italia de Núria G.

Los que me seguís de forma habitual conocéis mi pasión por la creatividad. Sabéis que siempre apuesto por las personas que ven el mundo como algo diferente.

Tengo la suerte de compartir clase con una alumna a la que le encanta la fotografía. Tanto es así que ha ganado el concurso de fotografía matemática que celebramos en nuestro instituto varias veces. Se llama Núria G. Es una persona a la que le encanta ver el mundo a través de su encuadre. Es una persona de una sensibilidad especial como podréis ver en esta entrada.

A mi la fotografía me gusta, pero dudo que algún día pueda llegar a sacar instantáneas como estas. Le he pedido su consentimiento para subir aquí algunas fotos y para deleite de todos nosotros me lo ha concedido. No perdais detalle porque algunas son espectaculares. No son las fotos habituales, van más allá.

Para empezar os dejo este lujo de una tarde lluviosa en Firenze.



Dejadme que os muestre esta preciosa estampa de Venezia. ¿Qué os sugiere este canal?


O esta de Bologna, la ciudad con más pórticos de toda Europa:



¿Y esta imagen cotidiana de Padova? Donde el tiempo tiene otra medida...



¿Habéis visto los buzones de Italia desde este punto de vista?




Este detalle de Pisa, es de una belleza tan exquisita que no me canso de admirarlo...




Y para acabar, otra de Pisa, donde uno puede relajarse y dejarse llevar...



Tengo muchas más, algunas son tan espectaculares que prefiero que Núria las cuelgue por si misma. Ya que la belleza de sus encuadres merecen una exposición en un lugar más adecuado.

Muchas gracias de nuevo Núria. Mis recuerdos de Italia son magníficos y ahora con tus encuadres permanecen además de en mi memoria, en el tiempo.